Créditos y débitos 2024-2025
En el presente artículo te daremos algunas nociones para comprender las diferencias entre créditos y débitos.
Los débitos representan egresos o deducciones de la cuenta bancaria de una persona cual sea que fuere su régimen, por consiguiente, cuando una persona paga por un producto o servicio, realiza una inversión u otra acción que represente un gasto, se produce un proceso de descuento de determinada cantidad de dinero, es decir, un débito, incluso cuando hay cuentas por pagar. No obstante, dicho egreso genera un ingreso.
Sin embargo, el crédito es un dinero que recibe una persona a modo de préstamo por un banco u otra entidad financiera, el cual debe pagarse en un plazo determinado y con intereses, el límite y el monto del crédito dependerán de:
- El monto que otorgue la institución o agencia que emite el crédito.
- El historial o buró de crédito.
- La capacidad de pago del cliente.
- Los ingresos mensuales o anuales del cliente.
Por lo tanto, los débitos es lo que se debe y los créditos lo que se tiene en haber gracias a un préstamo realizado por una entidad bancaria o agencia prestamista.
¿Qué es un débito? ¿Qué es un crédito?
Para comprender la diferencia entre débitos y créditos es necesario profundizar en sus definiciones. En este sentido:
Los débitos o ingresos: aumentan las cuentas a debitar o minimizan las cuentas crediticias, por lo tanto, el débito puede reflejar un aumento del activo o una disminución del pasivo.
El débito representa:
- Los activos que están en haber.
- Los gastos y las pérdidas generadas.
- Quien recibe.
Los créditos o egresos: aumentan una cuenta crediticia o reducen una cuenta de débito. Por lo tanto, un crédito te disminuirá los activos y se generará el incremento del pasivo que sea de utilidad para la persona.
El crédito representa:
- Los ingresos y ganancias generadas.
- Los pasivos que están en haber.
- El dador.
¿Cuáles son las reglas que debes tener presente?
Para aprender a manejar los débitos y los créditos debes tener presente:
- Hay cuentas que se incrementan con los débitos:
- Cuentas de dividendos.
- Cuentas de gastos.
- Activos fijos.
- Pérdidas generadas.
- Hay cuentas que se incrementan con los créditos:
- Cuentas de ganancias.
- Cuentas de ingresos.
- Pasivos generados.
- El patrimonio neto.
Por lo tanto, cualquier Persona Física, Persona Física con Actividad Empresarial o Persona Moral siempre está sujeta a “un sistema de doble entrada”.
¿Es importante llevar un libro de cuentas?
Siempre es necesario llevar un balance general donde se reflejen los débitos y los créditos, los activos y los pasivos que se tienen en haber, donde se recomienda que:
- Con cada asiento de débito se debe reflejar uno de crédito y/o viceversa.
- El débito debe reflejarse en la izquierda y el crédito en la derecha.
- Cada vez que se lleve la cuenta del débito y del crédito, lo recomendable es totalizar los montos.
- Cualquier cuenta de activo (débitos), considera:
- Liquidez monetaria (dinero en efectivo).
- Las cuentas por cobrar.
- Mercadería en existencia.
- Gastos cancelados con anticipación.
- Bienes e inmuebles en uso.
- Inversiones realizadas.
- Inmobiliario.
- Cualquier cuenta de pasivo (créditos), considera:
- Cuentas por pagar (dinero que se le debe a un prestamista, proveedor, empresa o a una persona).
- Documentación a pagar.
- Deudas que son a largo plazo.
- Ingreso no devengado, es decir, un capital que ingresa por anticipado.
- Patrimonio: dinero invertido y resultados acarreados.
¿Cuáles son las cuentas de débitos y cuáles son las cuentas de crédito?
Para que tengas una mayor noción de lo reflejado anteriormente te indicaré a qué clasificación pertenecen algunas de las diversas cuentas existentes en materia contable. Estas son:
- Dinero disponible: cuenta débito.
- Dinero o cuentas por cobrar: cuenta débito.
- Activos fijos (fondos sin depositar, inventario, maquinaria, etc.): cuenta de débito.
- Activos corrientes (propiedades y equipos): cuenta de débito.
- Las cuentas por pagar de acreedores u otras: cuenta de crédito.
- Tarjetas de crédito o de negocios: cuenta de crédito.
- Pasivos corrientes: cuenta de crédito.
- Pasivos a largo plazo (pasivos no corrientes o acreedores a largo plazo): cuenta de crédito.
- Fondos independientes: cuentas de crédito.
- Ingresos fijos: cuentas de crédito.
- Costo generado por venta de bienes: cuenta de débito.
- Gastos corrientes: cuenta de débito.
¿Tarjetas de crédito y tarjetas de débito?
Una vez comprendida la diferencia entre una cuenta de crédito y una de débito, hablaremos sobre las diferencias existentes entre una tarjeta de crédito y otra de débito.
Las tarjetas de débito representan deducción de capital, por lo tanto, al utilizar una tarjeta de débito se genera una reducción de los montos existentes en una cuenta bancaria que esté afiliada a la tarjeta utilizada, en consecuencia, no se puede gastar más del monto que se refleje en la cuenta.
Las tarjetas de crédito generan un dinero prestado por un banco para que sea de uso o beneficio al cliente, esta cantidad de dinero extendida debe ser cancelado en un plazo determinado y con un interés en específico, posterior a la fecha de deducción. O sea, cuando se hace uso de una tarjeta de crédito, se genera un préstamo del banco emisor.
Las tarjetas de débito:
Con relación a las tarjetas de débito estas funcionan de manera diferente a una tarjeta de crédito, puesto que extraen dinero automáticamente de la cuenta a la cual están afiliadas, por ejemplo, cuando se lleva a cabo una compra. Sin embargo, para su uso, la persona debe tener un saldo activo en la cuenta bancaria.
Las tarjetas de crédito:
Las tarjetas de crédito le brindan al cliente la posibilidad de utilizar dinero prestado por una entidad financiera que otorga una línea de crédito por un monto en particular. Dicha tarjeta debe ser utilizada bajo la suscripción de diferentes condiciones legales.
Ellas actúan al igual que un crédito, con la única diferencia que sirve para realizar pagos por puntos de venta o de manera online.
Diferencias entre una tarjeta de crédito y una tarjeta de débito
Algunas diferencias a considerar son:
- Diferencias por emisión:
La tarjeta de crédito la emite un banco o cualquier entidad financiera para que el titular pueda tener acceso a bienes y servicios por medio de un crédito.
La tarjeta de débito es emitida por un banco para que el titular pueda adquirir bienes, productos o servicios o pagar deudas con su propio dinero, debitándose automáticamente el monto de su cuenta bancaria.
- Con relación al pago:
Con la tarjeta de crédito el pago es posterior a la compra o pago de la deuda con intereses y en un plazo determinado.
Con la tarjeta de débito el pago se realiza en el momento exacto de la adquisición del bien o el pago del servicio
- La cuenta bancaria:
Para tener una tarjeta de crédito no es obligatorio contar con una cuenta bancaria, en algunas entidades solo requieren de un comprobante de ingreso.
Para obtener una tarjeta de débito es obligatorio tener una cuenta bancaria a la cual se pueda afiliar la tarjeta.
- Con relación a los montos a disponer:
Las tarjetas de crédito tienen un límite dependiendo de la línea de crédito.
En cambio que las tarjetas de débito solo disponen del monto existente en la cuenta bancaria de la naturaleza que sea.
- Con relación a los intereses:
Las tarjetas de crédito generan una tasa de interés que puede cancelada en cuotas durante un tiempo determinado, mientras que las tarjetas de débito no generan intereses.
¿Cómo funcionan las tarjetas de crédito?
Las tarjetas de crédito funcionan de la siguiente manera:
- Se cancelan a final de mes o en un día determinado del mes siguiente.
- Se cobran por porcentajes. Por ejemplo, si el monto a cancelar es de 1.000 pesos, se puede cancelar un 10% al mes de esa cantidad.
- Se establece una cuota fija de dinero todos los meses.
- Las tarjetas de crédito tienen fecha de vencimiento.
Es necesario que sepas que además de los intereses, las tarjetas de crédito acarrean el pago de ciertas comisiones que en muchos casos son más elevadas que las implicadas por una tarjeta de débito. Y la cantidad de la línea de crédito dependerá del poder adquisitivo del cliente.
A modo de colofón:
Los débitos y los créditos son nociones financieras y contables totalmente diferentes, sin embargo, en algunos contextos un término acarrea al otro y viceversa.